La presión vecinal y la movilización social han logrado este miércoles frenar un desahucio previsto en la calle San Lorenzo del Casco Viejo de Pamplona. La afectada, Ana Belén, una mujer de 57 años con un 75 % de discapacidad y en tratamiento oncológico, ha evitado por ahora el lanzamiento judicial de su vivienda, en la que reside desde 2016.
Desde las 7:30 horas, más de un centenar de personas acudieron a la convocatoria del Sindicato Socialista de Vivienda de Iruñerria y se concentraron frente al portal del domicilio para impedir el desalojo. Según ha informado el sindicato en una nota de prensa, fue la «presión popular y la firmeza colectiva» la que permitió forzar una negociación in situ con la comitiva judicial y, finalmente, la suspensión del desahucio.
Desde el colectivo denuncian que este intento de lanzamiento «se ha pretendido ejecutar de forma silenciosa» y que forma parte de «una lógica que prioriza la propiedad privada y el beneficio de los multipropietarios frente al derecho a la vivienda y a la salud de las personas». En este caso, el propietario del inmueble acumularía varios pisos y, según indican, se habría negado a negociar una solución alternativa.
Aunque la suspensión del desahucio supone un alivio temporal, desde el sindicato advierten de que el proceso judicial sigue en marcha y que podría fijarse una nueva fecha en breve. Por ello, reclaman la paralización definitiva del procedimiento y una solución habitacional estable para la afectada. «Hoy se ha conseguido parar el golpe, pero el conflicto sigue abierto», señalan.
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— Kontseilu Sozialista Iruñerria (@Kontseilua_Iru) June 4, 2025
LORTU DUGU! ¡LO HEMOS CONSEGUIDO!
Bertaratu diren pertsona guztei esker, etxegabetzea geldiaraztea lortu dugu.
Gracias a todas las personas que han asistido, hemos logrado paralizar el desahucio. https://t.co/sGu9wXm7U4 pic.twitter.com/Jo872ZtQGJ
El sindicato también ha querido agradecer la solidaridad mostrada por quienes se han movilizado desde primera hora, así como la colaboración del espacio Katakrak, que ha gestionado el desayuno para quienes participaron en la protesta.
La organización concluye su comunicado reiterando su compromiso con la lucha por una «vivienda universal, gratuita y de calidad».