La comparecencia de este viernes en el Parlamento de Navarra de la plataforma ‘Navarros todos y la historia completa’, en defensa del Monumento a los Caídos, ha estado marcada por un ambiente de tensión y una fuerte confrontación política que ha desembocado en el abandono de la sala por parte de varios grupos.
La sesión, celebrada en la Comisión de Memoria y Convivencia a petición del Grupo Mixto (VOX), ha contado con la participación de Manuel Sierra e Ismael de la Barba, portavoces de la plataforma promotora de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que reclama la protección patrimonial del edificio. Sin embargo, lo que comenzó como una exposición de argumentos sobre el valor histórico, artístico y urbanístico del monumento ha derivado en un duro enfrentamiento verbal, especialmente durante la intervención del parlamentario de VOX, Emilio Jiménez.
Jiménez ha encendido los ánimos al afirmar que «el Partido Comunista nunca debía haberse legalizado, mató a más de cien millones de personas». También ha acusado a la izquierda parlamentaria de «supurar odio», ha cargado contra los socialistas por los casos de corrupción y ha reprochado a Geroa Bai su «tibieza». Sus palabras han provocado la inmediata salida de la sala de los parlamentarios de Contigo-Zurekin, EH Bildu y Geroa Bai, que han expresado su rechazo a continuar en una sesión que, a su juicio, había cruzado todas las líneas del respeto democrático.
El propio portavoz de Contigo-Zurekin ha mantenido previamente un tenso rifirrafe con el parlamentario de VOX que ya había elevado el tono del debate, mientras que representantes de EH Bildu y Geroa Bai han condenado el fascismo y defender el proyecto de resignificación del monumento, que consideran necesario para reparar la memoria de las víctimas del franquismo.
Por su parte, los representantes de la plataforma han defendido que la ILP no tiene adscripción política ni ideológica y que su único objetivo es preservar lo que consideran patrimonio cultural navarro. Manuel Sierra ha lamentado que la iniciativa haya sido rechazada en dos ocasiones por la Mesa del Parlamento, denunciando una «interpretación restrictiva del procedimiento» y apelando a que «muchos navarros tienen interés en debatir este asunto en sede parlamentaria».
En una línea similar, José Ismael de la Barba ha criticado la «acción política sectaria» contra determinados espacios históricos, reivindicando el valor artístico y técnico del Monumento a los Caídos y reclamando su inclusión en los listados de protección patrimonial.
Pese al abandono de la comisión por parte de tres grupos, el acto se ha desarrollado hasta su finalización entre reproches y un ambiente crispado, lo que evidencia que el debate sobre el futuro del Monumento a los Caídos continúa siendo uno de los más divisivos en la política navarra actual.
