La Guardia Civil ha detenido a dos hombres en el marco de la "Operación Merlín" en Burgos, acusados de tenencia y distribución de pornografía infantil. Uno de ellos, de 36 años, grababa sin consentimiento a familiares, amigos y compañeros de trabajo en el baño de su domicilio, utilizando cámaras ocultas.
La investigación comenzó tras un informe del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), que alertó sobre páginas web con contenido pedófilo.
Los agentes identificaron 70 archivos de vídeo de extrema gravedad, descargados por una veintena de usuarios. Uno de los detenidos, localizado en Burgos, almacenaba miles de archivos multimedia de pornografía infantil en su domicilio, lo que llevó a su arresto e ingreso en prisión provisional sin fianza. En el registro de su vivienda, se hallaron cámaras camufladas que grabaron imágenes íntimas de hasta 14 personas sin su consentimiento, todas ellas allegadas al detenido.
Un nuevo registro permitió localizar un dispositivo de grabación oculto en el techo del baño. El segundo detenido, de 23 años y residente en Las Merindades, también fue identificado como usuario de la plataforma de descarga de contenido pedófilo. En su teléfono móvil se encontró material pornográfico adicional.
En total, se intervinieron más de 50 terabytes de material, principalmente imágenes de menores, incluyendo tres ordenadores, tres móviles, cuatro discos duros, cinco cámaras (dos de fabricación propia), diez tarjetas microSD y un sistema de almacenamiento en red de 40 TB.
La operación fue dirigida por el Equipo de Investigación Tecnológica (EDITE) de la Policía Judicial de Burgos, con apoyo del Departamento de Cibercrimen de la Unidad Central Operativa (UCO).
Los detenidos y las diligencias han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción 4 de Burgos y del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Villarcayo.
