Las patrullas de la Policía Foral han citado a juicio rápido a siete personas en distintos juzgados navarros por delitos contra la seguridad vial cometidos este fin de semana, cinco de ellos por alcoholemias penales y dos por circular sin permiso. Entre los casos más llamativos figura el de un conductor interceptado en Cabanillas, que arrojó una tasa de 1,46 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en la NA-126 y que, según reconoció a los agentes, había consumido «unas 20 cervezas». El vehículo presentaba, además, la luna trasera completamente rota.
Las restantes alcoholemias penales se detectaron en Egüés (0,88 y positivo en dos drogas), Lekunberri (0,67), Burgui (0,84) y Huarte (1,26, tras una conducción errática y con el carné suspendido durante 26 meses). Por circular sin permiso se imputó a una conductora en Areso y a un conductor en Barañáin.
Desde el viernes por la tarde, las patrullas han atendido 35 accidentes de tráfico, con un balance de dos heridos muy graves —conductor y copiloto en una salida de vía en Arguiñano—, otros dos graves —una pasajera del mismo vehículo y un motorista en Vidángoz—, y nueve siniestros causados por atropellos de fauna (cinco corzos, tres jabalíes y un ciervo).