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La Universidad de Navarra desarrolla un método pionero para proteger la sangre durante la radioterapia

Históricamente, la planificación de estos tratamientos se ha centrado en evitar dañar órganos fijos próximos al tumor

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  • Científicos de la Universidad de Navarra desarrollan un modelo pionero que mide la radiación en sangre circulante y allana el camino hacia tratamiento

La Universidad de Navarra ha dado un paso decisivo hacia una medicina oncológica más personalizada y segura. Un equipo liderado por Marina García-Cardosa, investigadora del grupo de Física Médica y Biofísica (PhysMed) de la Facultad de Ciencias, ha desarrollado un método innovador para cuantificar con precisión la dosis de radiación que recibe la sangre durante los tratamientos de radioterapia.

Históricamente, la planificación de estos tratamientos se ha centrado en evitar dañar órganos fijos próximos al tumor. Sin embargo, la sangre —tejido móvil y vital que recorre todo el cuerpo— había quedado fuera de los cálculos habituales. La tesis doctoral de García-Cardosa propone cambiar este paradigma y considerar la sangre como un “órgano en riesgo”, adaptando los tratamientos para protegerla cuando sea posible.

El método, denominado FLIP-HEDOS, combina información anatómica del paciente, datos de circulación sanguínea y parámetros del plan radioterápico para simular con exactitud la irradiación acumulada en la sangre. Los resultados demuestran que factores como la cercanía del tumor a grandes vasos, el tipo de radioterapia aplicada o el gasto cardíaco influyen directamente en la respuesta inmunológica del paciente.

“La sangre no es un mero vehículo, sino un tejido sensible a la radiación. Células como los linfocitos pueden verse afectadas incluso con dosis muy bajas, lo que compromete la capacidad del organismo para responder a infecciones, inflamaciones o al propio tumor”, explica García-Cardosa. Este aspecto adquiere una relevancia especial en los tratamientos que combinan radioterapia con inmunoterapia.

El proyecto ha contado con la colaboración clínica del Cancer Center Universidad de Navarra y con el asesoramiento internacional del profesor Harald Paganetti, del Massachusetts General Hospital y Harvard Medical School. El reconocimiento no se ha hecho esperar: el trabajo ha sido distinguido por la Sociedad Europea de Radioterapia y Oncología (ESTRO), la Radiation Research Society Conference en Estados Unidos y la Sociedad Española de Física Médica. Además, sus resultados han sido publicados en revistas científicas de referencia como Radiation Physics and Chemistry, Physics in Medicine & Biology y Clinical Cancer Research.

“Pensar en la sangre como un órgano dinámico a proteger supone un cambio de paradigma en la radioterapia moderna”, destaca Javier Burguete, catedrático de Física Médica y Biofísica de la Universidad de Navarra y director de la tesis.

El impacto del marco FLIP-HEDOS podría ir más allá de la radioterapia, abriendo la puerta a simulaciones sobre distribución de fármacos o radiofármacos, así como a nuevas estrategias de radioprotección. En palabras de Burguete, “demuestra que proteger la sangre puede ser determinante en la evolución de un paciente tras el tratamiento de un tumor”.

El proyecto ha contado con el apoyo de la Agencia Española de Investigación, el Gobierno de Navarra, Fundación “la Caixa” y la Asociación de Amigos de la Universidad de Navarra. Sus conclusiones, ya reconocidas a nivel internacional, plantean un horizonte en el que los tratamientos oncológicos serán cada vez más precisos, personalizados y respetuosos con el sistema inmunológico.

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