Agentes de la Policía Nacional, en una operación llevada a cabo en tan solo tres días y con la crucial colaboración internacional de las autoridades de Marruecos, han logrado desarticular dos organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas. La operación ha culminado con la intervención de 20 toneladas de hachís y la detención de 20 personas, que han ingresado en prisión por los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.
Las organizaciones utilizaban camiones frigoríficos procedentes de Tánger que llegaban al Puerto de Algeciras como vía de entrada para el estupefaciente con destino a Europa. El hachís estaba hábilmente oculto en dobles fondos de los remolques, escondido tras cajas de pimientos verdes para evadir los controles policiales y aduaneros.
La investigación, dirigida por la Fiscalía Especial Antidroga de Algeciras, detectó los vehículos tras su desembarco. El primer camión fue interceptado el 21 de octubre en una finca de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), donde se procedía a descargar la droga. En su interior se hallaron 12.000 kilos de hachís. Quince personas fueron detenidas en este operativo.
Solo tres días después, se interceptó un segundo transporte. El camión fue localizado en una nave industrial al norte de Granada, donde los investigadores descubrieron un segundo alijo de aproximadamente 8.000 kilos de hachís, oculto tras una estructura de paneles de madera. Cinco personas fueron detenidas en este segundo golpe.
Ambos camiones habían realizado el trayecto protegidos por otros vehículos lanzadera que realizaban labores de contravigilancia para alertar de la presencia policial. Se intervinieron nueve vehículos, una pistola automática y más de 7.000 euros. Además, la policía constató que parte del hachís estaba ya preparado en pequeños paquetes con envoltorios de colores llamativos, simulando ser chocolatinas, con el objetivo de atraer al consumidor más joven.





