El Gobierno de Navarra prevé abrir a comienzos de 2026, “esperamos que en el mes de febrero”, un nuevo recurso asistencial destinado a menores víctimas de violencia sexual. Así lo ha anunciado este jueves el vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad, Félix Taberna, durante el pleno de control del Parlamento foral en respuesta a una interpelación del grupo Geroa Bai.
Taberna ha reconocido la gravedad del problema y la urgencia de actuar ante una realidad “que no se puede negar”. Entre enero y septiembre de este año se han registrado 223 delitos por violencia sexual en Navarra, y el pasado año las denuncias ascendieron a 369. “Hay una parte de la sociedad navarra que está enferma de machismo”, ha afirmado el vicepresidente, quien ha advertido también contra el negacionismo y la confusión entre distintos tipos de violencia.
El Gobierno foral trabaja actualmente en cuatro ejes —atención integral, sensibilización y prevención, coordinación y formación—, con medidas como la puesta en marcha del Centro de Atención Integral a las Violencias Sexuales, que desde su apertura hace año y medio ha atendido a 457 mujeres. Además, en el ámbito sanitario se ha implantado un sistema de detección temprana que ha identificado en 2024 a 1.188 mujeres con algún tipo de violencia, de las cuales un 8% fueron de carácter sexual.
Taberna también ha destacado el refuerzo del grupo especializado en violencia contra la mujer de la Policía Foral en Estella, y ha avanzado que el Gobierno trabaja ya en un nuevo acuerdo interinstitucional, el cuarto desde que se puso en marcha este marco de colaboración. “Esperamos poder renovarlo el próximo año, y aprobar a comienzos de 2026 el segundo plan de acción contra la violencia hacia las mujeres”, ha señalado.
Durante el debate, los grupos parlamentarios han coincidido en la necesidad de mantener la unidad frente a la violencia machista, aunque han expresado matices y críticas.
Desde Geroa Bai, Blanca Regúlez ha advertido de que “persisten brechas en la prevención, en la atención integral y en la reducción de las violencias”, si bien ha reconocido que Navarra “sigue siendo pionera” en esta materia.
Por parte de UPN, Isabel Olave ha alertado de que las agresiones sexuales “se han disparado un 48%” y que Navarra “encabeza la tasa de víctimas por cada 10.000 mujeres”, con más de 1.900 casos activos en el sistema Viogén.
La socialista Arantza Biurrun (PSN) ha defendido la renovación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y ha advertido del riesgo que suponen “las corrientes reaccionarias que intentan arrasar los derechos conquistados por las mujeres”.
Desde EH Bildu, Oihana Gallo ha reclamado que la renovación del acuerdo interinstitucional incluya cuestiones como la violencia vicaria y la ejercida mediante nuevas tecnologías, además de avanzar en la reparación a las víctimas.
La portavoz del PPN, Maribel García Malo, ha recordado que “en Navarra hay 1.941 casos activos en Viogén, 48 de alto riesgo”, y ha reclamado atención especial para las mujeres supervivientes de trata y prostitución.
Por su parte, Miguel Garrido (Contigo-Zurekin) ha apelado a “reforzar el consenso” como herramienta esencial para erradicar la violencia machista, mientras que Emilio Jiménez (Grupo Mixto) ha acusado al Gobierno de “quedarse en la propaganda” y ha reclamado “protección real, sin ideologías”.
Taberna ha cerrado su intervención recordando que la mayoría de las agresiones sexuales “se producen en el entorno más cercano” y ha insistido en desterrar la imagen del asalto nocturno por parte de un desconocido. “Lo importante es actuar sobre la raíz del problema: el machismo que todavía impregna nuestra sociedad”, ha concluido.




