Un grupo de casi cien adolescentes del IES Plaza de la Cruz ha participado este jueves en una actividad de reforestación en la loma del polígono de Agustinos, en Pamplona. En esta jornada, plantaron 60 arbustos y 100 árboles como parte del bosque de absorción del Ayuntamiento de la ciudad, una iniciativa que comenzó en 2022 para compensar la huella de carbono.
El bosque de absorción de Pamplona: una apuesta por la sostenibilidad
El proyecto se enmarca en la Estrategia de Transición Energética y Cambio Climático 2030, que busca un modelo de ciudad sostenible y descarbonizada. Los estudiantes contribuyeron a reponer 'marras', ejemplares que no prosperaron. La actividad incluyó una sesión de aprendizaje con educadores ambientales de Garrapo. El Ayuntamiento suministró las plantas, cubriendo el 50% de los 227 ejemplares que necesitan reposición.
El bosque de absorción de Pamplona, que cubre 2,4 hectáreas, compensará 322 toneladas de CO2 en 30 años, considerando solo el 20% del CO2 absorbido por la plantación y el 70% de los árboles plantados. Esta cifra podría aumentar dependiendo de la evolución del bosque. Actualmente, el bosque cuenta con aproximadamente 2.325 árboles y 400 arbustos, incluyendo variedades de arce, roble peloso, serbales, encinas, junípero, romero, y pacharanes.
Nuevos bosques en Mendebaldea y Ezkaba
A principios del próximo año, Pamplona contará con dos nuevos bosques de absorción en Mendebaldea y Ezkaba. El primero se ubicará en un espacio de pastos de 22.671 metros cuadrados, mientras que el segundo estará accesible desde el camino a los pabellones del Transporte Público Comarcal. El Ayuntamiento invertirá 456.468 euros en ambos proyectos, que serán ejecutados por la empresa Eulen.
En total, se plantarán 7.900 plantas, entre árboles y arbustos. Las plantaciones se realizarán a principios de año, respetando el ciclo vegetativo de las especies. En Ezkaba, se buscará acelerar la evolución del bosque autóctono, adaptando las plantaciones a las condiciones del terreno y la flora existente.
Compromiso con la Agenda Urbana 2030
Estos proyectos forman parte del Plan de infraestructuras verdes y azules y drenaje urbano sostenible, alineado con la Agenda Urbana 2030 y la Estrategia de transición energética y cambio climático. El plan evalúa el estado actual de la infraestructura verde y azul de la ciudad y propone acciones para adaptarse a eventos climáticos extremos, mejorando la gestión del espacio público verde.
El Ayuntamiento también instalará hoteles de insectos y refugios de fauna para mejorar la biodiversidad en estos espacios. Además, se mejorarán los caminos, se señalizarán las masas forestales y se instalarán áreas de descanso, bancos y fuentes para que la ciudadanía pueda disfrutar de estas nuevas zonas verdes.
Un futuro verde para Pamplona
Agustinos y Mendebaldea están destinados a convertirse en bosques de nueva planta dentro del término municipal, al igual que el Bosque Olímpico de Mendillorri. La parcela intervenida en Ezkaba es parte del patrimonio municipal, clasificada como comunal según la normativa vigente. Con estas acciones, Pamplona avanza hacia un futuro más sostenible y resiliente.






