Los sindicatos LAB, UGT y CCOO, representantes de las plantillas de los almacenistas de alimentación en Navarra, han denunciado este lunes la falta de avances reales en la negociación del convenio colectivo del sector, que continúa estancada tras meses de reuniones. A pesar de que en cada encuentro se registra “algún pequeño avance”, las centrales sindicales aseguran que la patronal mantiene una actitud de “mínimos”, evitando abordar las mejoras fundamentales que necesitan las personas trabajadoras.
Según han explicado en una nota conjunta —acompañada de imágenes de las delegadas y delegados sindicales frente a sus centros de trabajo—, muchos de los puntos esenciales continúan bloqueados, lo que impide cerrar un acuerdo que responda a las necesidades actuales del sector.
Reivindicaciones clave aún sin respuesta
Las centrales han desgranado una batería de propuestas que consideran imprescindibles para dignificar el empleo en los almacenes del sector alimentario, un ámbito que fue esencial durante la pandemia y que continúa sosteniendo la cadena de suministro. Entre las demandas destacan:
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Salarios dignos, con incrementos superiores al IPC para asegurar el poder adquisitivo.
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Reducción de jornada y más fines de semana libres para favorecer la conciliación.
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Compensación justa de las horas extra, con el mismo valor tanto si se recuperan como si se cobran.
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Mejoras en los pluses, actualmente considerados “insuficientes”.
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Un sistema de elección de vacaciones más equitativo.
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Ampliación de permisos retribuidos orientados al cuidado y la conciliación.
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Descansos específicos para mayores de 60 años, fundamentales para proteger la salud laboral.
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Excedencias con garantías, que aseguren estabilidad al retornar al puesto.
Los sindicatos aseguran que, pese a la insistencia, “la patronal solo cede en lo mínimo”, evitando negociar aspectos que permitirían transformar las condiciones laborales de manera real y efectiva.
“Un convenio digno es imprescindible”
LAB, UGT y CCOO reclaman a las empresas del sector una negociación “valiente y responsable”, recordando que las reivindicaciones no son excepcionales, sino “estrictamente necesarias” para garantizar un empleo de calidad en un sector marcado por ritmos exigentes, carga física y un volumen de trabajo creciente.
“Es hora de abandonar la estrategia del bloqueo y asumir la responsabilidad que corresponde. Las plantillas necesitan un convenio que suponga un verdadero avance y no un simple ajuste superficial”, señalan.
Las centrales anuncian que continuarán trabajando de manera conjunta para presionar a la patronal y lograr un acuerdo que dignifique el trabajo de cientos de profesionales que sostienen diariamente el funcionamiento del sector alimentario en Navarra.
