Ante la situación de calle que están viviendo varias personas migrantes, en su mayoría procedentes de Mali y actualmente ubicadas en el barrio donostiarra de Amara Berri, la Diputación Foral de Gipuzkoa, en coordinación con el Ayuntamiento de Donostia, ha habilitado de forma extraordinaria y temporal un recurso de alojamiento en Oñati. El recurso tiene capacidad para acoger a 50 personas migrantes que se encuentran en situación de calle, mientras esperan poder iniciar los trámites para solicitar protección internacional. Esta actuación se enmarca en la coordinación interinstitucional y tiene como objetivo ofrecer una respuesta urgente a una necesidad social apremiante.
No obstante, ambas instituciones consideran preocupante la inacción y la falta de iniciativa del Gobierno español ante esta situación. La insuficiencia del sistema estatal de acogida está dejando en una situación de vulnerabilidad a decenas de personas migrantes. Ante esta falta de respuesta por parte del Gobierno español, son las instituciones vascas las que han asumido, una vez más, la responsabilidad de ofrecer una solución inmediata y urgente, de carácter provisional.
Diputación y Ayuntamiento subrayan la necesidad de que el Gobierno español agilice los procedimientos y active los recursos necesarios para garantizar una acogida digna y evitar situaciones de desprotección. En este sentido, ambas instituciones reiteran su disposición a colaborar con el gobierno estatal para articular una respuesta estructural, eficaz y coordinada que permita abordar esta realidad desde el compromiso y con garantías de protección.