El diputado general de Álava, Ramiro González, ha criticado duramente la decisión del sindicato ELA de no participar en la mesa de reindustrialización de Aiaraldea, un espacio impulsado por la Diputación Foral para abordar el futuro industrial y el empleo en la comarca. González ha asegurado que "negarnos a participar es darle la espalda a la comarca, a su industria y a los trabajadores y trabajadoras que dependen de ella".
El diputado foral ha lamentado que ELA haya optado por situarse fuera de este foro, concebido como un espacio abierto a todos los agentes políticos, sociales y económicos "para sumar, acordar y proteger el empleo", y donde se trabajan "soluciones reales". Además, González ha criticado las formas del sindicato al anunciar su decisión a través de los medios de comunicación, sin haber contactado previamente con la Diputación para solicitar información. "No han tocado la puerta, ni una llamada, ni un correo", ha censurado, añadiendo que estas formas "no son diálogo: son bloqueo".
El responsable foral ha sido tajante al afirmar que "quien se autoexcluye de la mesa renuncia a construir y opta por la confrontación estéril". Según González, la realidad es "sencilla: o se está en la solución, o se está en el problema".
Pese a la negativa de ELA, la Diputación Foral de Álava ha confirmado que mantendrá su rumbo y el calendario de trabajo establecido, contando con "todos los agentes que sí quieren arrimar el hombro". El diputado general ha concluido que, si ELA decide finalmente "abandonar el ruido" y sumarse al trabajo conjunto, "la mesa le espera", pero ha advertido que "la comarca no puede perder más tiempo".





