El consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, ha afirmado este miércoles que «no nos consta que BSH haya vetado a ningún posible inversor», en referencia a las declaraciones del comité de empresa de la planta de Esquíroz, que apuntaban a un supuesto rechazo por parte de la multinacional a una oferta de compra «muy potente».
Irujo ha respondido a estas afirmaciones durante la rueda de prensa posterior a la sesión del Ejecutivo foral, en la que ha detallado las gestiones que el Gobierno de Navarra está llevando a cabo para salvar el futuro de la planta navarra, cuyo cierre amenaza con dejar sin empleo a unas 650 personas.
El consejero ha recordado que, en coordinación con el comité de empresa y de forma consensuada, una delegación del Gobierno de Navarra se trasladó recientemente a Madrid para mantener encuentros con los ministerios de Industria y de Trabajo. El objetivo: reforzar la petición conjunta de mayor flexibilidad a la multinacional BSH ante una planta que, como ha subrayado Irujo, «no tiene pérdidas contables».
«Pedimos que tuvieran esa flexibilidad a la hora de trabajar con los plazos que ellos mismos pusieron encima de la mesa cuando hablaron de esos seis meses a partir de la carta del 16 de diciembre», ha explicado, en referencia al anuncio inicial del cierre y al margen dado para encontrar una alternativa industrial.
Irujo ha insistido en que ese mismo mensaje fue también respaldado por el propio ministro de Industria en la reunión mantenida en Barcelona hace dos semanas. Además, ha asegurado que se mantiene una interlocución constante con la multinacional a través de una consultora que esta contrató para estudiar posibles salidas, y que tanto el Gobierno de Navarra como el Ejecutivo central siguen en la búsqueda activa de un inversor industrial que garantice el mantenimiento de la actividad en Esquíroz.
En este sentido, ha reconocido que se sigue trabajando con todos los medios disponibles para asegurar un futuro a las personas trabajadoras de la planta, mientras se acerca la fecha límite del 16 de junio, cuando se cumplirán los seis meses que BSH fijó en su hoja de ruta. A día de hoy, según ha indicado Irujo, la empresa no ha respondido aún a la solicitud de ampliar ese margen temporal.
«Tendremos que ir valorando también posibles pasos a dar», ha concluido el consejero, que ha reiterado el compromiso del Gobierno foral con la defensa del empleo industrial en Navarra.