El equipo Castillo de Gorraiz Valle de Egüés cerró su participación en la tercera jornada de la Copa de España con una derrota por 95-80 frente al Reina Proteínas Clavijo en Logroño, si bien el resultado no empaña las buenas sensaciones de cara al inicio de la liga. El conjunto navarro mostró una significativa mejoría tanto en defensa como en ataque, lo que le permitió competir de tú a tú y, notablemente, ponerse por delante en el marcador durante la segunda mitad.
El inicio del encuentro estuvo marcado por el acierto de los jugadores desde la línea de tres, lo que ayudó a compensar las dificultades iniciales en el rebote (23-16). En el segundo cuarto, los de Jotas Unzué intensificaron su trabajo defensivo y, con las aportaciones de Pablo Fernández y Pablo Yárnoz, lograron reducir la diferencia para llegar al descanso con un ajustado 43-40.
Tras la reanudación, el equipo vivió sus momentos más brillantes. James Potier, quien se alzó como el máximo anotador del encuentro para el Castillo de Gorraiz, firmó un tercer cuarto espectacular. Bien secundado por Yárnoz, la dupla consiguió dar la vuelta al marcador, demostrando la ambición y el nivel competitivo del equipo. No obstante, el acierto ofensivo del Clavijo en el tramo final del partido terminó por decantar la balanza en favor del conjunto riojano.
El choque también dejó un balance positivo con el debut de Iñigo Garbayo, jugador procedente del Nacional masculino, que dejó "muy buenas sensaciones" en los minutos que estuvo en pista. Con esta imagen de competitividad, el Castillo de Gorraiz Valle de Egüés fija ya su atención en el inminente estreno en Segunda FEB, que tendrá lugar el próximo 4 de octubre en casa y ante su afición.