Vecinos del Pueblo Viejo de Barañáin han recibido con satisfacción el anuncio del Ayuntamiento de Pamplona sobre la paralización del Plan Elizpea, un proyecto urbanístico que contemplaba la construcción de 271 viviendas y más de 600 plazas de aparcamiento junto al entorno natural del Arga.
Según informó el consistorio pamplonés, el plan carece de respaldo jurídico y su continuidad podría suponer la pérdida de cerca de un millón de euros en subvenciones europeas, motivo por el cual se ha decidido detener su tramitación.
La plataforma vecinal “Paremos el plan Elizpea”, que desde hace dos años viene manifestando su oposición al proyecto, ha considerado “positiva” esta decisión. “Nos parece una buena noticia para el entorno y para la sostenibilidad urbana de Barañáin”, señalan sus portavoces, que recuerdan que el desarrollo proyectado se ubicaba en “un espacio muy reducido”, donde se preveían seis edificios de entre cinco y doce alturas, 452 plazas de aparcamiento privadas y 155 públicas.
El colectivo subraya que el paraje de Elizpea “es un entorno natural formado por campos de labranza, arboledas de distintas especies y una pradera integrada en la línea urbanística del Pueblo Viejo”, y destacan su valor como zona de tránsito hacia Miluze y el paseo fluvial del Arga.
Los vecinos insisten en la necesidad de proteger el suelo rústico y de potenciar la función de reserva fluvial de este espacio, que consideran esencial para el equilibrio ecológico de la zona. “No nos oponemos a los desarrollos urbanísticos que den respuesta al problema de la vivienda en Barañáin, siempre que se planifiquen de forma sostenible”, recalcan.
En este sentido, el grupo vecinal recuerda que existen parcelas municipales ya urbanizadas destinadas a vivienda protegida, donde el Ayuntamiento podría enfocar sus esfuerzos.
Los miembros de la plataforma concluyen su comunicado subrayando que la paralización del Plan Elizpea “es un paso adelante en la defensa del patrimonio natural y la planificación responsable del municipio”.





