Agentes de la Policía Municipal de Pamplona han detenido a un varón e investigan a otras dos personas por su presunta implicación en tres delitos de hurto cometidos este semestre mediante el conocido “método del abrazo”, una técnica en la que los delincuentes se ganan la confianza de personas mayores con gestos afectuosos para sustraerles objetos de valor.
Los hechos tuvieron lugar en la calle Ochagavía, la avenida de Carlos III y la calle Serafín Olave, en los meses de julio, agosto y octubre, respectivamente. Las víctimas fueron personas de edad avanzada, a las que sustrajeron dos relojes —uno de ellos un Rolex valorado en unos 17.000 euros y otro de la marca Omega— y una cadena de oro con crucifijo.
El pasado viernes, sobre las 17:40 horas, un agente de paisano localizó un vehículo sospechoso con tres ocupantes —un hombre y dos mujeres— que coincidía con el descrito en las denuncias. Durante el seguimiento, el conductor se saltó hasta cuatro semáforos en rojo, motivo por el que fue interceptado e investigado también por un delito contra la seguridad vial.
Tras las pesquisas, el varón fue detenido por su implicación en el robo con violencia del reloj Rolex ocurrido en julio en la calle Ochagavía. Su arresto contó con la colaboración de la Policía Nacional, ya que se encontraba fuera del término municipal de Pamplona. Las dos mujeres que lo acompañaban quedaron en calidad de investigadas.
El equipo instructor considera que los tres forman parte de un grupo criminal perfectamente coordinado, que utiliza distintos vehículos —a menudo registrados a nombre de terceros— para dificultar su identificación. Las cámaras de videovigilancia han sido clave para vincularlos con los hechos.
Según explican desde la Policía Municipal, los autores seleccionan a víctimas mayores, a las que se acercan con excusas amables, halagos o gestos de cariño antes de abrazarlas y robarles discretamente sus joyas o relojes.
Tras pasar a disposición judicial, el detenido ha quedado en libertad mientras continúa la investigación.
