La Policía Municipal de Pamplona ha cerrado un fin de semana de notable intensidad operativa, con 379 intervencionesregistradas entre el viernes y el domingo y nueve personas detenidas como presuntas autoras de diferentes delitos. Las actuaciones abarcan desde amenazas y malos tratos hasta resistencia, atentado a la autoridad, quebrantamiento de medida cautelar, daños y lesiones.
La primera detención se produjo el viernes por la tarde en el barrio de Mendillorri, donde una menor fue arrestada por un presunto delito de amenazas graves tras una segunda intervención policial en el mismo punto, minutos después de que los agentes hubieran mediado en un conflicto inicial.
Ese mismo día, alrededor de las 23:30 horas, una intervención por discusión familiar en Rochapea culminó con la detención de una mujer acusada de malos tratos y daños, después de agredir presuntamente a su pareja y causar desperfectos en la vivienda.
El sábado también concentró varias detenciones. En Azpilagaña, a mediodía, una pelea entre ocupantes de un vehículo y otras personas derivó en la detención de una mujer por desobediencia y resistencia a los agentes. Ya por la tarde, en el mismo barrio, un hombre fue arrestado por quebrantar una orden de alejamiento.
Las horas nocturnas entre el sábado y el domingo registraron nuevos incidentes. En San Juan, una pelea se saldó con la detención de un hombre y una mujer como presuntos autores de un delito de lesiones a otras dos personas. Más tarde, ya en el Casco Antiguo, un individuo fue detenido por atentado a agentes de la autoridad tras encararse de manera violenta con la patrulla durante una identificación.
La última parte del fin de semana tampoco estuvo exenta de episodios relevantes. En la noche del domingo, la Policía Municipal detuvo a un hombre por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar después de que agrediera supuestamente a su expareja. Finalmente, ya de madrugada, agentes de paisano arrestaron en Txantrea a un varón sorprendido dañando varios vehículos estacionados en la vía pública.
De las más de 370 intervenciones, destacan 69 por problemas de convivencia, tanto por conflictos vecinales como por peleas en la calle. Además, los agentes realizaron 52 asistencias a personas en situación de necesidad y atendieron 25 avisos por molestias o ruidos, la mayoría procedentes de viviendas que perturbaban el descanso de la vecindad.
