El Departamento de Memoria y Convivencia, Acción Exterior y Euskera del Gobierno de Navarra, a través de Euskarabidea – Instituto Navarro del Euskera, ha llevado a cabo un programa de bertsolarismo en residencias de ancianos durante octubre y noviembre. Este programa, que por primera vez se ha dirigido a personas mayores, busca ofrecer actividades lúdicas en euskera que beneficien el bienestar psico-emocional de los residentes.
Un proyecto que fomenta la oralidad en euskera
El programa, desarrollado por Lanku Bertso Zerbitzuak, ha contado con la participación de bertsolaris de diferentes géneros y edades. Las sesiones se han llevado a cabo en seis residencias, incluyendo la residencia Andra Mari de Lesaka y la residencia San José de Bera. Cada una de estas sesiones ha tenido como objetivo proporcionar una experiencia gratificante a los mayores a través del bertsolarismo.
Euskarabidea, encargado de promover actividades en euskera, ha organizado este programa por primera vez en residencias de personas mayores. La iniciativa ha sido diseñada para aprovechar el potencial del bertsolarismo en la mejora del bienestar cognitivo y emocional de los ancianos, quienes han podido revivir recuerdos y emociones a través de los bertsos. La interacción con los bertsolaris ha permitido a los residentes participar activamente en las sesiones.
Inversión para mejorar el bienestar de los mayores
El proyecto ha supuesto una inversión de 7.736,76 euros, mediante un contrato público suscrito con Lanku Bertso Zerbitzuak SL. Este esfuerzo económico se ha traducido en un impacto positivo en el bienestar psicológico de los residentes. Las sesiones han fomentado la memoria y la expresión emocional, ayudando a los mayores a conectar con su pasado y a experimentar emociones positivas.
Durante las sesiones, los residentes han contado y cantado viejos bertsos y anécdotas, lo que ha permitido trabajar su memoria y dar espacio a sus emociones. Esta actividad ha evitado estados psico-afectivos negativos, provocando sonrisas y risas espontáneas. Los bertsos han servido como un puente para que los mayores rememoren su infancia y juventud, despertando emociones latentes.
Desde una perspectiva lúdica, el bertsolarismo ha convertido a las personas mayores en protagonistas y sujetos activos de las sesiones. Especialmente las vascohablantes han tenido la oportunidad de cantar, conversar y proponer temas para los bertsolaris. Esta interacción ha sido clave para el éxito del programa, que ha logrado involucrar a los residentes de manera significativa.
En resumen, el programa de bertsolarismo en residencias de ancianos de Navarra ha demostrado ser una iniciativa valiosa para mejorar el bienestar psico-emocional de los mayores. La combinación de cultura, lenguaje y emoción ha resultado en una experiencia enriquecedora tanto para los participantes como para los organizadores.
