El eurodiputado navarro de EH Bildu, Pernando Barrena, ha denunciado que una “ofensiva política” del Partido Popular ha entorpecido en el último momento el proceso para declarar el euskera lengua oficial de la Unión Europea. En una entrevista concedida a Naiz Irratia, Barrena ha explicado que, tras semanas de avances y un clima favorable, la presión del PP ha generado incertidumbre en varios Estados miembros y ha provocado que algunos de ellos aseguren “no estar preparados para tomar una decisión”.
“Todos los argumentos técnicos y económicos ya han sido superados. Esto va ahora de voluntad política, y el PP ha entrado para ponerlo todo patas arriba”, ha afirmado tajante.
El asunto, que ha sido tratado en varias ocasiones en la Conferencia de Asuntos Generales del Consejo, parecía bien encauzado. No obstante, según ha relatado Barrena, el Partido Popular “ha utilizado las instituciones europeas para su guerra interna contra Pedro Sánchez”, provocando una reacción en cadena entre gobiernos que han empezado a expresar dudas. La decisión deberá esperar, al menos, hasta la presidencia polaca en junio, o, si no, a la danesa en julio.
Críticas al PP y defensa del multilingüismo
Barrena ha sido especialmente duro con el Partido Popular, al que ha acusado de “no creer en la diversidad” y de defender “una Europa monocolor y monolítica, donde solo tengan cabida las grandes lenguas”. “Esa actitud, tan conocida en Euskal Herria, ha vuelto a quedar en evidencia en Bruselas”, ha lamentado.
A su juicio, la estrategia del PP responde a una doble motivación: frenar el reconocimiento político y simbólico del euskera y desgastar al Gobierno español en clave interna. “Pero cada vez más eurodiputados se están hartando de esta utilización partidista de las instituciones europeas”, ha asegurado.
Argumentos superados y potencial transformador
Durante la entrevista, Barrena ha desmontado los principales argumentos contrarios a la oficialidad. Sobre el coste económico, ha recordado que “el Estado español ha asumido el gasto íntegro”, por lo que no afecta al resto de países. En cuanto a las dificultades técnicas, ha subrayado que la UE ya opera con 24 lenguas y que se avecina la incorporación de muchas más con futuros Estados miembros. Además, ha remarcado que los avances en inteligencia artificial facilitarán aún más la traducción simultánea en el futuro.
En lo legal, ha insistido en que el euskera, el catalán y el gallego ya están reconocidos en la Constitución española y gozaban de ese estatus antes de la entrada de España en la UE.
Una oficialidad con implicaciones prácticas y simbólicas
Barrena ha recalcado que el reconocimiento del euskera como lengua oficial de la UE supondría “un avance estratégico” para su normalización. “La ciudadanía vasca podría comunicarse con las instituciones europeas en euskera, recibir respuestas oficiales en su idioma, y ver reflejado el euskera en pasaportes, etiquetas, prospectos y herramientas digitales”, ha explicado.
Además, permitiría integrar el euskera en las bases terminológicas de la UE, fundamentales para su presencia en los desarrollos tecnológicos y en la inteligencia artificial. “Se reforzaría el estatus institucional de la lengua, se legitimaría su uso en cualquier ámbito y aumentaría la autoestima de su comunidad hablante”, ha defendido.
Una oportunidad también para Navarra
Barrena ha señalado que la oficialidad podría tener efectos positivos en Navarra, donde “el euskera sigue sin estar normalizado, ni en la administración ni en la educación”. Ha mostrado su preocupación por las reticencias del PSN, que afirma que su base social teme conflictos sociales derivados de la lengua. “El euskera no va contra nadie, es un patrimonio común que merece ser protegido y promovido”, ha afirmado.
El eurodiputado ha reclamado a los socialistas navarros mayor valentía y coherencia con la política lingüística que defienden sus compañeros en el ámbito estatal: “Nos gustaría ver al PSN comprometerse realmente con una política lingüística más ambiciosa y justa”.
“La diversidad no debilita Europa, la enriquece”
Barrena ha concluido que el proceso de oficialización del euskera es una cuestión de derechos fundamentales. “La diversidad no es un obstáculo, es una fortaleza. Oficializar el euskera no solo garantiza derechos, sino que envía un mensaje claro: en Europa, todas las lenguas y culturas tienen cabida”.
La lucha por la oficialidad continúa, y pese al retroceso temporal provocado por las maniobras del Partido Popular, Barrena ha mostrado su confianza en que la decisión llegará. “Tarde o temprano, el euskera será oficial en Europa. Es una cuestión de justicia, de coherencia democrática y de respeto”.
Redacción PamplonaActual