El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Navarra, José Luis Arasti, se ha pronunciado este miércoles sobre la decisión de los inversores chinos de abandonar el proyecto de Mina Muga, impulsado por la empresa Geoalcali.
A preguntas de los medios de comunicación, durante la habitual rueda de prensa tras la sesión del Gobierno de Navarra, Arasti ha reconocido que la retirada de estos capitales supone “una mala noticia” no solo para Navarra y Aragón, territorios directamente afectados por la explotación, sino también “para España y Europa en su conjunto”.
El consejero ha subrayado no obstante, que se trata de un proyecto privado, en el que el papel del Ejecutivo foral ha sido hasta ahora “institucional, de acompañamiento y apoyo en materia de permisos, como con cualquier iniciativa que pueda ser positiva para Navarra”.
Dependencia de la potasa
Arasti ha explicado la relevancia estratégica de Mina Muga en un contexto internacional marcado por la dependencia europea de la importación de potasa: “Europa depende en un 60 % de la potasa de Rusia y Bielorrusia. Contar con una explotación en casa ayudaría mucho tanto a la agricultura como a la seguridad alimentaria”, señaló.
Aunque reconoció que la salida de los inversores chinos se debe a la incertidumbre judicial que pesa sobre el proyecto tras un recurso pendiente de resolución, quiso dejar claro que ello no implica el fin del plan minero. “La empresa sigue trabajando, rehaciendo su estrategia y buscando nuevos inversores. Desde el Gobierno de Navarra apoyaremos y ayudaremos en lo que esté en nuestra mano”, ha afirmado
Contacto con el Ministerio
Preguntado por la necesidad de una licencia única derivada de la citada sentencia judicial, Arasti ha confirmado que el Ejecutivo navarro mantiene contacto con el Ministerio para la Transición Ecológica con el fin de coordinar los pasos administrativos necesarios.
Asimismo, ha reconocido que el Gobierno mantiene conversaciones con Geoalcali para seguir de cerca la evolución de la situación: “Estamos hablando de un proyecto que podría generar hasta 800 empleos en Navarra y también en Aragón. Evidentemente, hay conversaciones, porque creemos que es un proyecto importante”.
Arasti ha insistido en que, pese al revés, el proyecto continúa vivo: “Esperemos que en el futuro Mina Muga pueda salir adelante con nuevos apoyos financieros”.