Un control preventivo de la Policía Foral en Pueyo ha acabado esta semana con la detención de un padre, de 55 años, y su hijo, de 36, como presuntos autores de un delito de hurto.
En el registro del vehículo en el que viajaban, los agentes descubrieron una auténtica “compra fantasma”: 45 cajas de carabineros, 42 bandejas de pulpo, 40 de redondo, 22 cañas de cerdo, 14 de rabo de vacuno, 7 botellas de whisky y varios productos más.
La “compra” ascendía a unos 2.500 euros y ninguno de los dos supo explicar su procedencia.
El nerviosismo del hijo y sus 32 antecedentes policiales —muchos de ellos por robos y hurtos— despertaron la sospecha de los agentes, que solicitaron la apertura del maletero y confirmaron así el hallazgo.



