La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha detenido este martes al presidente de la Diputación de Almería y máximo responsable del Partido Popular en la provincia, Javier Aureliano García Molina, en el marco de una investigación por corrupción en la compra de material sanitario durante la pandemia. Junto a García Molina habrían sido arrestados el vicepresidente de la Diputación, Fernando Giménez, y el alcalde de Fines, Rodrigo Sánchez (también del PP), entre otros implicados, por presuntas adjudicaciones irregulares y cobro de comisiones.
El caso, conocido como “Caso Mascarillas”, se centra en la adquisición de equipos de protección y mascarillas para la Diputación de Almería en 2020, en contratos firmados bajo emergencia sanitaria. Azor Corporate Ibérica, la empresa adjudicataria, estaba ya bajo sospecha por sus relaciones con el narcotráfico, el blanqueo de capitales y la venta de armas. Según señalan medios como elDiario.es, la UCO señala que los políticos detenidos habrían firmado contratos por cerca de dos millones de euros, con comisiones ilegales de entre 200.000 y 400.000 euros para la trama.
La investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Almería y sin relación con causas abiertas en la Audiencia Nacional o el Tribunal Supremo, se inició en 2021 tras la detención del entonces vicepresidente de la Diputación, Óscar Liria, también del PP. Entonces se descubrió dinero en efectivo y otras evidencias vinculadas a presuntos pagos ilícitos. La operación de este martes supone un salto cualitativo al afectar directamente a la cúpula del Partido Popular provincial.
La instrucción sigue adelante para esclarecer el alcance de las irregularidades cometidas durante los procesos de contratación pública en plena pandemia. Mientras, los registros y detenciones continúan, mientras la investigación judicial mantiene imputados a otros cargos vinculados con los contratos.


