El Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra (CODINNA) ha expresado su «sorpresa y total desacuerdo» ante el nuevo programa de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) puesto en marcha por la Red de Salud Mental de Navarra y presentado recientemente por el Gobierno foral. La entidad lamenta que el equipo asistencial anunciado no contemple la presencia de dietistas-nutricionistas, a pesar de tratarse de un área donde la alimentación constituye un elemento central del tratamiento.
Según detalla el propio Gobierno de Navarra en la información publicada en su web, el programa está atendido por un psiquiatra, una psicóloga clínica, una enfermera, un terapeuta ocupacional, dos Técnicos de Cuidados Auxiliares de Enfermería y una trabajadora social a tiempo parcial. Para CODINNA, esta composición deja fuera a un perfil «altamente especializado y esencial» en el abordaje de los TCA.
El director del programa, Mikel Ruiz, defendió que el nuevo sistema pretende ofrecer «una atención especializada, intensiva, global y eficaz», especialmente dirigida tanto a los casos recientes como a aquellos con mayor cronicidad o complejidad clínica. Sin embargo, el Colegio profesional considera incoherente que un objetivo tan amplio se plantee sin la participación de expertos en alimentación humana.
Desde CODINNA señalan que las dietistas-nutricionistas cuentan con la máxima cualificación académica en nutrición y dietética dentro de las profesiones sanitarias, y recuerdan que unidades similares en hospitales privados de Navarra, así como en centros públicos de otras comunidades autónomas, sí incluyen a estos profesionales en sus equipos. «No se puede entender que un programa dirigido a trastornos directamente vinculados con la alimentación prescinda de una figura imprescindible para un enfoque verdaderamente multidisciplinar», destacan.
En su valoración, el Colegio subraya que la ausencia de dietistas-nutricionistas revela un desconocimiento del acto de alimentarse, «que no es sólo biológico, sino también culinario, cultural, gastronómico y antropológico». Solo con esta perspectiva amplia, añaden, es posible diseñar tratamientos dietéticos adecuados que, combinados con la intervención psicológica, forman el pilar fundamental en la recuperación de estas patologías.
El Colegio insiste en que la inclusión de este profesional en la Sanidad Pública navarra sigue siendo una necesidad urgente y un reto pendiente. Recuerdan que Navarra se encuentra en desventaja respecto a otras comunidades donde la figura del dietista-nutricionista ya está incorporada de manera estable en el sistema sanitario. «Seguiremos trabajando para que esto sea una realidad lo antes posible», concluyen.
