La Fundación Caja Navarra ha confirmado este martes su compromiso con las personas mayores a través de la continuidad de su actividad en los seis centros de mayores que gestiona en Pamplona, al tiempo que impulsa nuevos proyectos orientados a la atención comunitaria, la innovación social y la sostenibilidad.
En línea con los objetivos recogidos en su Plan Estratégico 2023-2028, la entidad mantiene una línea de trabajo centrada en ofrecer una atención de calidad, cercana y adaptada a las nuevas realidades del envejecimiento. Desde la Fundación subrayan que los servicios en estos centros han sido prestados mediante una empresa contratista externa, responsable en exclusiva de la relación laboral con el personal. Por tanto, la Fundación Caja Navarra no interviene ni es responsable de las decisiones laborales adoptadas por dicha empresa.
Entre las novedades, destaca la cesión temporal del centro Estafeta al Ayuntamiento de Pamplona, una operación que permitirá asegurar la continuidad del servicio en dicho espacio. Asimismo, la entidad mantiene negociaciones avanzadas con el Ayuntamiento de Sangüesa para la cesión del centro de mayores de la localidad, con el fin de garantizar que continúe funcionando como un recurso comunitario de atención y participación.
Además, la Fundación trabaja en el diseño de un nuevo proyecto de innovación social en el local de Larrabide, que estará abierto a toda la comunidad, pero en el que las personas mayores seguirán teniendo un papel central.
Estas actuaciones, según la Fundación, responden a un proceso de análisis reflexivo orientado a una gestión responsable de los recursos y a su adaptación a los nuevos retos sociales. La entidad avanza así hacia un modelo de atención centrado en la persona, de carácter comunitario y con criterios de sostenibilidad.
Con esta línea de acción, la Fundación Caja Navarra refuerza su vocación de servicio y reafirma su voluntad de seguir impulsando proyectos sociales que sitúen a las personas mayores como eje prioritario de su actuación.
