El Parlamento de Navarra ha aprobado este lunes una declaración institucional en la que condena de forma enérgica los ataques contra el personal sanitario, las infraestructuras médicas y los servicios de salud en contextos de crisis y conflicto armado. El texto, presentado conjuntamente por los grupos de UPN, PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, recibió el respaldo de la Junta de Portavoces.
La Cámara navarra reclama al Gobierno de España y a la comunidad internacional una mayor rendición de cuentas sobre estos ataques, promoviendo investigaciones independientes y medidas claras que combatan la impunidad. Además, aboga por la creación de mecanismos de monitoreo internacionales que garanticen la protección efectiva de profesionales sanitarios y centros médicos en zonas de conflicto.
El Parlamento también hace un llamamiento a reforzar la diplomacia humanitaria, de modo que las legislaciones antiterroristas no limiten la labor estrictamente imparcial de las organizaciones que prestan asistencia médica. Asimismo, insta al Ejecutivo central a aplicar de forma concreta la Resolución 2286 de la ONU, para que se traduzca en acciones efectivas de protección a los trabajadores de la salud y a la asistencia humanitaria en escenarios de guerra.
Con esta declaración, la Cámara foral se suma a las voces internacionales que exigen respeto al personal médico como pilar fundamental del derecho humanitario, subrayando la necesidad de blindar su labor en medio de los conflictos armados.