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Navarra Sur

Toquero anuncia que “intensificará la presión” contra la planta de gas biometano a 800 metros del casco urbano de Tudela

El alcalde acusa al Gobierno de Navarra de “falta de coherencia” y advierte de que “la Ribera no se va a quedar atrás” si es necesario movilizarse

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  • El alcalde en una rueda de prensa anterior

El alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, ha manifestado su “decepción y sorpresa” ante la decisión de la Dirección General de Medioambiente del Gobierno de Navarra, que ha determinado que la ampliación de la planta centralizada de fangos en la depuradora de Tudela “no tiene efectos significativos sobre el medio ambiente”. El regidor considera que esta resolución “abre la puerta a que NILSA construya una macroplanta de biometano a apenas 800 metros del casco urbano, con el riesgo que ello conlleva para la seguridad de la población”.

Toquero ha calificado de “incoherente” la postura del Ejecutivo foral, al recordar que “mientras se insiste —y estamos de acuerdo en ello— en la necesidad de proteger el espacio natural de Las Norias del impacto de los residuos generados durante el Día del Ángel, se autoriza una instalación de alto impacto junto al Ebro y a escasa distancia de miles de viviendas”.

El alcalde ha subrayado que el proyecto “no se limita a ampliar la planta de fangos”, sino que persigue “generar y vender gas biometano”, lo que, en su opinión, responde al interés económico de NILSA y del Gobierno de Navarra: “Pretenden hacer caja a costa de la seguridad de los tudelanos y de la Ribera, y eso no lo vamos a permitir”, ha afirmado.

Toquero ha recordado que el Parlamento de Navarra aprobó recientemente una moratoria para la planta de biometano prevista en Sesma, “pese a ser más pequeña y estar mucho más alejada de los núcleos urbanos”. “En Sesma, la presión vecinal ha sido determinante —ha añadido—. Si de movilizarse se trata, la Ribera no se va a quedar atrás. Desde el Ayuntamiento de Tudela llegaremos donde haga falta para que NILSA busque otro emplazamiento y no coloque una bomba medioambiental a 800 metros de nuestras casas”.

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