El grupo municipal de Unión del Pueblo Navarro (UPN) ha cuestionado al alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, por su gestión en el cese del gerente del Ayuntamiento, Iñigo Anaut, tras un incidente de alcoholemia. UPN señala que dos concejales del equipo de gobierno de Asiron no dimitieron en situaciones que considera similares. Las críticas se centran en lo que consideran un doble rasero en la aplicación de medidas disciplinarias.
UPN ha recordado que en 2009, el actual edil de Contigo-Zurekin, Txema Mauleon, fue condenado por un delito contra la seguridad vial tras dar una tasa de alcoholemia de 0,67. Asimismo, en 2016, a Maider Beloki de EH Bildu no le hicieron la prueba de alcoholemia después de atropellar a dos ancianos durante Nochevieja. Ambos casos, según UPN, no resultaron en dimisiones, lo que consideran incoherente con la postura del alcalde actual.
La formación foralista ha criticado las declaraciones de Asiron, quien afirmó que la izquierda es ejemplar en comparación con la derecha. UPN considera que el cese de Anaut, ocurrido este lunes, solo se produjo tras la publicación de los hechos en los medios de comunicación, lo que para ellos no es un ejemplo de transparencia ni de ejemplaridad.
UPN ha señalado que las declaraciones del alcalde son "surrealistas", teniendo en cuenta los antecedentes de los concejales de su equipo de gobierno. Para el grupo municipal, es necesario que las acciones y declaraciones del alcalde sean coherentes. La formación foralista ha insistido en que no es ejemplar que un cargo público presente una tasa de alcoholemia delictiva, ni que el cese se produzca solo después de la presión mediática.
El grupo municipal de UPN ha reiterado que la ejemplaridad no solo debe predicarse, sino también practicarse. En este sentido, han instado al alcalde a ser consecuente con sus propias palabras y a aplicar las mismas medidas disciplinarias a todos los miembros de su equipo de gobierno, sin importar su afiliación política.
La polémica surge en un contexto donde el comportamiento de los cargos públicos está bajo constante escrutinio. UPN ha aprovechado la ocasión para destacar la importancia de la coherencia en la gestión pública. La formación foralista ha manifestado su preocupación por lo que consideran un trato desigual y una falta de responsabilidad en la gestión de incidentes similares en el pasado.
UPN ha concluido sus declaraciones instando al alcalde a revisar sus políticas internas y a garantizar que todos los miembros de su equipo de gobierno sean tratados con el mismo rigor. La formación foralista espera que este episodio sirva para establecer un estándar uniforme en la gestión de incidentes que involucren a cargos públicos en el Ayuntamiento de Pamplona.