En una intensa sesión de la comisión de investigación del Senado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respondió con firmeza a las acusaciones vertidas por la senadora de UPN, María Caballero, especialmente en lo que atañe al Gobierno de Navarra y a la presidenta María Chivite. Frente a las críticas sobre el supuesto involucramiento de cargos socialistas navarros en tramas de corrupción, Sánchez afirmó con rotundidad: "La señora Chivite cuenta con toda mi confianza".
Caballero había cuestionado directamente a Sánchez sobre la pérdida de confianza en el Partido Socialista de Navarra tras la caída de Santos Cerdán, uno de los implicados en la trama que afecta a Navarra. La senadora sostuvo que esta caída marcaba un punto de inflexión, y señaló la relación estrecha del número tres del partido con empresas vinculadas a los escándalos, insinuando riesgos para el Gobierno de Chivite.
Ante estas acusaciones, Sánchez defendió la legalidad de las actuaciones y negó cualquier evidencia de ilegalidad: "No hay absolutamente nada ilegal en ninguna de estas cuestiones. Todos los informes de las oficinas fiscalizadoras indican que no existe ninguna ilegalidad". Respecto a la adjudicación polémica en Navarra, indicó que se han realizado tres auditorías para garantizar transparencia y subrayó que tales investigaciones también están disponibles para la senadora Caballero como muestra de diligencia.
Al ser interpelado específicamente si había perdido la confianza en la formación socialista navarra, Sánchez reiteró su apoyo al gobierno regional, agradeciendo además "a los millones de españoles que votan al Partido Socialista y a las otras formaciones que propiciaron un gobierno de progreso" tanto en el Estado con en Navarra.
Quizá la única respuesta a la que ha podido ser claro, ya que Sánchez ha usado su turno en todo momento para hablar sin apenas responder sobre lo que se le preguntaba , ha sido en lo relativo a si sabía que Santos Cerdan acudía a algunas reuniones del Gobierno Foral con el ministerio o con empresarios de la construccion. "A mí no me consta, pero eso no significa que no se produjera", ha dicho el presidente del Gobierno y líder sociaslista.
Esta defensa clara sobre Navarra y la presidenta Chivite fue una de las respuestas más destacadas del presidente en esta sesión dominada por la exigencia de responsabilidades políticas y la crítica a la gestión del PSOE en varios frentes, con acusaciones de corrupción y mala praxis política.





