El departamento de Cohesión Territorial ha destinado 10,46 millones de euros a ayuntamientos y concejos de Navarra, a través del Programa de Libre Determinación del Plan de Inversiones Locales (PIL). Esta iniciativa busca fortalecer la autonomía local y mejorar infraestructuras esenciales mediante inversiones prioritarias.
Jesús María Rodríguez, director general de Administración Local y Despoblación, ha subrayado la importancia de esta medida para la cohesión territorial. Según Rodríguez, el reparto de fondos permite a los municipios decidir sobre las inversiones necesarias para su desarrollo, promoviendo la autonomía local. Además, este esfuerzo fortalece las redes de cooperación entre el Gobierno y los ayuntamientos, consolidando la lealtad entre las administraciones públicas.
Compromiso firme del Ejecutivo Foral con las entidades locales
Rodríguez ha enfatizado el compromiso del Ejecutivo Foral con las entidades locales, recordando que el PIL proporciona certeza financiera a ayuntamientos y concejos. Entre 2022 y 2025, el Programa de Libre Determinación ha distribuido cerca de 45,5 millones de euros a estas entidades. Este año, los municipios navarros recibirán entre 1.800 y 186.000 euros, dependiendo de su población y dispersión geográfica.
El PIL, como principal instrumento de apoyo a las entidades locales, se estructura en tres líneas: Programa de Inversiones, Programa de Libre Determinación y Programación Local. Cada una de estas líneas busca equilibrar planificación, autonomía municipal y capacidad de respuesta ante necesidades urgentes o proyectos significativos. Las inversiones se centran en el abastecimiento de agua, tratamiento de residuos y proyectos locales.
El PIL como herramienta clave para el desarrollo local
La programación local del PIL permite financiar infraestructuras esenciales como redes de abastecimiento, saneamiento, pavimentaciones y alumbrado, priorizando criterios técnicos y poblacionales. Las inversiones de libre determinación ofrecen a los ayuntamientos mayor margen de decisión para abordar proyectos prioritarios. Este enfoque busca garantizar que los fondos se utilicen de manera efectiva para satisfacer las necesidades locales.
Para 2025, el Departamento de Cohesión Territorial planea destinar 365 millones de euros a las entidades locales de la Comunidad Foral, representando un 56,1% del presupuesto total del departamento. De esta cantidad, 331 millones de euros se asignarán al Fondo de Transferencias Corrientes, el principal instrumento de financiación municipal. El PIL, por su parte, superará los 34,8 millones de euros.
Fomento del equilibrio territorial en Navarra
Esta distribución presupuestaria reafirma el compromiso del departamento con el municipalismo y el equilibrio territorial en Navarra. El objetivo es asegurar que todos los municipios, independientemente de su tamaño o ubicación, tengan acceso a recursos para mejorar sus infraestructuras y servicios básicos. Esto es esencial para promover el desarrollo sostenible y la calidad de vida en toda la región.
El esfuerzo del Gobierno Foral por impulsar la autonomía local y mejorar las infraestructuras en Navarra es una muestra de su compromiso con el desarrollo equitativo de la región. A través del PIL y otros mecanismos de financiación, se busca fortalecer la capacidad de los municipios para gestionar sus propias necesidades y prioridades.
