La Policía Local de Logroño intensificó su actividad el pasado fin de semana, del 5 al 7 de septiembre de 2025, formulando un total de 83 denuncias por incumplimientos de diversas ordenanzas municipales, en un esfuerzo por garantizar el orden y la convivencia en la ciudad.
El dato más llamativo, que ha generado revuelo entre los ciudadanos, es que 41 de estas sanciones fueron por orinar en la vía pública, una práctica que sigue siendo una de las principales infracciones en la capital riojana.
El resto de las denuncias se distribuyeron de la siguiente manera: 28 por consumir alcohol en la calle, una conducta prohibida por la ordenanza municipal; 7 por vociferar y causar molestias en la vía pública, afectando la tranquilidad de los vecinos; 5 por actos incívicos que generan suciedad, como arrojar desperdicios; y 1 por generar ruido excesivo en un domicilio. Además, un establecimiento hostelero fue sancionado por no respetar el horario estipulado para su actividad, lo que refleja el compromiso de las autoridades por hacer cumplir las normativas locales. Pero las actuaciones de la Policía Local no se limitaron a las ordenanzas municipales.
También se formularon 23 denuncias por infracciones a la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, principalmente relacionadas con la tenencia y consumo de estupefacientes y faltas de respeto a la autoridad. Estas sanciones subrayan los esfuerzos por mantener la seguridad en espacios públicos durante el fin de semana. En materia de seguridad vial, se impusieron 27 denuncias adicionales. De estas, 12 derivaron de controles de alcoholemia positivos, evidenciando la prioridad de la Policía Local para prevenir la conducción bajo los efectos del alcohol. Además, se sancionó a 8 usuarios de patinetes eléctricos, probablemente por circular en zonas no permitidas o sin cumplir las normativas de movilidad.
También se registraron 4 denuncias por circular con la ITV caducada y 3 por conducir bajo los efectos de drogas, reforzando la vigilancia en las carreteras de Logroño. Este operativo, llevado a cabo en diferentes puntos de la ciudad, responde a la necesidad de garantizar el cumplimiento de las normativas municipales y estatales, especialmente en fines de semana, cuando las conductas incívicas tienden a incrementarse.
La Policía Local de Logroño continúa trabajando para promover una convivencia respetuosa y segura, instando a los ciudadanos a cumplir con las ordenanzas y evitar sanciones.