La mañana de este miércoles ha estado marcada por un nuevo episodio en el conocido como 'Caso Leire'. Leire Díez, exmilitante socialista y conocida en los medios como la presunta "fontanera" del PSOE, ha convocado una rueda de prensa en el Hotel Novotel para explicar su papel en la polémica de los audios filtrados, en los que se la escucha buscar información comprometedora sobre mandos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
Díez, que ayer martes había solicitado su baja voluntaria del PSOE tras declarar durante dos horas ante el responsable jurídico del partido en Ferraz, compareció ante una multitud de periodistas y cámaras. En su declaración, negó haber actuado en nombre o representación del PSOE, insistiendo en que su labor era “periodística y de investigación”, amparada por el artículo 20 de la Constitución. “No soy ni fontanera ni cobarde”, afirmó, defendiendo que su trabajo era personal y no por encargo de nadie, y que su baja del partido le permitiría actuar con mayor libertad.
La expectación era máxima, pero Díez dejó claro desde el inicio que no admitiría preguntas, limitándose a leer su declaración y posando ante los medios antes de abandonar la mesa.
Irrupción de Víctor de Aldama: gritos, empujones y denuncia
El momento de mayor tensión llegó al finalizar la intervención de Díez. Víctor de Aldama, empresario imputado en la trama Koldo y señalado como comisionista, irrumpió en la sala y se dirigió directamente a la exmilitante socialista entre gritos de “mentirosa” y “sinvergüenza”. Aldama la acusó de mentir en toda su comparecencia y de “reírse de los españoles”, asegurando ante los medios que la denunciaría y que “habrá consecuencias para Sánchez”.
Video por Onda Cero Radio
? Aldama aparece por sorpresa en la comparecencia de Leire Díez: "Es una sinvergüenza"
— Onda Cero (@OndaCero_es) June 4, 2025
?? Síguelo en directo https://t.co/erdabbTHXY pic.twitter.com/OfbnUjtDDZ
Aldama buscando a Leire Díez para que la arresten.
— José Vico ????? (@josevico4) June 4, 2025
Es alucinante lo de este país.
Aldama, delincuente confeso, está en la calle porque tenía unas pruebas que nadie ha visto aún. pic.twitter.com/z1aBisEdKO
La escena se volvió caótica cuando el empresario Javier Pérez Dolset, también mencionado en los audios, intentó impedir que Aldama se acercara a Díez, produciéndose empujones ante la mirada de decenas de periodistas y cámaras. Díez, visiblemente afectada, logró abandonar la sala y refugiarse en una estancia contigua, según relató Onda Cero.
Posteriormente, la propia Díez declaró a Telecinco que se encontraba “al borde de un ataque de ansiedad” por el episodio y anunció que acudiría a comisaría para denunciar a Aldama por acoso, asegurando además que en los próximos días presentará pruebas contra el empresario relacionadas con un presunto fraude de 140 millones de euros.
Reacciones políticas y consecuencias
El caso ha provocado una fuerte reacción política. Desde el PP y otros partidos de la oposición se exige la comparecencia del presidente Pedro Sánchez en el Congreso para dar explicaciones, mientras que el PSOE, tras la baja voluntaria de Díez, ha dejado en suspenso cualquier medida disciplinaria pendiente. El episodio ha servido para avivar la ofensiva política contra el Gobierno, con la convocatoria de manifestaciones y nuevas peticiones de transparencia.
La comparecencia de Leire Díez, lejos de aclarar el escándalo, ha terminado convertida en un espectáculo mediático y político, con acusaciones cruzadas, denuncias y un clima de máxima crispación. La irrupción de Víctor de Aldama ha añadido aún más incertidumbre a un caso que sigue sacudiendo la actualidad política española y que, previsiblemente, continuará generando titulares en los próximos días.