El Ayuntamiento de Pamplona ha concluido recientemente una nueva edición de la 'biciescuela', un programa diseñado para que la ciudadanía adulta aprenda a montar en bicicleta y mejore su destreza sobre dos ruedas. En esta ocasión, un total de 32 personas, mayoritariamente mujeres, formaron parte de la iniciativa que busca fomentar la movilidad sostenible en la ciudad.
Desde su inicio en 2017, la 'biciescuela' ha visto pasar por sus filas a 911 personas, que han adquirido o perfeccionado sus habilidades para andar en bicicleta. El Consistorio de Pamplona ofrece estos cursos de manera gratuita, dirigidos a adultos que no tuvieron la oportunidad de aprender a montar en bicicleta en su juventud o que no se sienten seguros al circular por la ciudad.
Clases adaptadas a todos los niveles
Las clases se realizan habitualmente en primavera y otoño, con una duración de entre seis y ocho horas distribuidas en cuatro tardes semanales. La última edición tuvo lugar entre el 22 de septiembre y el 2 de octubre, en el Museo de Educación Ambiental del barrio de Rochapea. Los 32 participantes fueron organizados en nueve grupos de diferentes niveles para adaptarse a las necesidades individuales.
Cuatro de estos grupos se dedicaron al nivel de iniciación, proporcionando conocimientos básicos para aquellos que nunca han montado en bicicleta. Durante las sesiones, se llevaron a cabo ejercicios para ayudar a los participantes a mantener el equilibrio y comenzar a pedalear en trayectos cortos. Este es un primer paso hacia el desarrollo de mayor seguridad y confianza.
Entrenamiento en maniobras y mecánica básica
Además de los cursos de iniciación, la 'biciescuela' ofrece formación en habilidades específicas. En la última edición, se organizaron cuatro grupos de seis horas cada uno, donde los participantes practicaron maniobras como giros, frenado, y esquivar objetos. También se impartieron nociones básicas de mecánica para reconocer el estado de la bicicleta y ajustar elementos de seguridad.
Las clases teóricas se llevaron a cabo en el Museo de Educación Ambiental, pero los participantes también tuvieron la oportunidad de practicar en el parque de Aranzadi. Este espacio abierto y libre de tráfico vehicular permitió a los ciclistas aplicar sus conocimientos de manera segura. En ocasiones, se realizaron paseos por vías tranquilas como el paseo del Arga.
Cursos de circulación en ciudad
La 'biciescuela' también ofrece un curso específico de circulación en ciudad, destinado a personas ya acostumbradas a la bicicleta. En esta edición, se formó un único grupo que recibió ocho horas de formación enfocada en la normativa de circulación y la seguridad en espacios compartidos con peatones y vehículos.
A través de recorridos reales por la ciudad, los participantes mejoraron sus habilidades para incorporarse a la calzada, señalizar en rotondas y actuar en cruces. Todo esto bajo la supervisión de dos monitoras. Además, se repasaron aspectos fundamentales de mecánica y se exploró la red ciclista de la ciudad, reforzando así la confianza de los ciclistas al moverse por Pamplona.







