Fernando Domínguez anuncia el cese del gerente del SNS-O

El consejero ha señalado que, tras un período de reflexión, se trata de una de las decisiones “más difíciles” de su trayectoria

Pamplona Actual

Una tecnología con IA de la UPNA permite a los drones volar, despegar y aterrizar de forma segura con intensos vientos

La tesis doctoral de Xabier Olaz Moratinos en la UPNA desarrolla un "cerebro artificial" (N-FCU) que usa aprendizaje por refuerzo para los drones

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

  • tesis drones xabier olaz

Una investigación doctoral llevada a cabo en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) ha dado lugar a una tecnología que mejora significativamente la capacidad de los drones para operar en condiciones de viento adverso. La tesis, defendida por Xabier Olaz Moratinos, se centra en abordar la principal vulnerabilidad de estos vehículos: su inestabilidad ante las ráfagas o cambios bruscos de viento, especialmente durante las fases críticas de despegue y aterrizaje.

El nuevo sistema desarrollado, denominado N-FCU (Unidad de Control de Vuelo Neuronal), funciona como un "cerebro artificial" que emplea redes neuronales y técnicas de aprendizaje por refuerzo. Este método de inteligencia artificial permite que el dron aprenda a ajustarse a situaciones variables por sí mismo, de manera similar al aprendizaje humano por ensayo y error. Recibe "recompensas" por actuar correctamente y "penalizaciones" si pierde estabilidad o se desvía en simulaciones de alta fidelidad.

Gracias a este enfoque, el sistema N-FCU reduce la dependencia de modelos explícitos complejos sobre el viento, haciendo que el dron sea más flexible y adaptable. Las simulaciones demuestran que el sistema es capaz de mantener un vuelo estable y realizar aterrizajes y despegues precisos (con errores inferiores a 30 centímetros) con vientos de hasta 10 metros por segundo (36 kilómetros por hora). Este rendimiento supera sustancialmente a los controladores tradicionales (como los basados en lógica PID), que a menudo degradan su funcionamiento con vientos de apenas 10 km/h, limitando gravemente cuándo y dónde pueden usarse los drones.

La capacidad de operar de forma segura con viento fuerte amplía enormemente el potencial de aplicación de los drones. Entre los usos futuros se encuentran las misiones de rescate en condiciones climatológicas difíciles, la inspección técnica de infraestructuras como parques eólicos, la vigilancia aérea o la entrega de suministros esenciales, permitiendo su uso en días en los que actualmente tienen que permanecer en tierra. La investigación ha sido dirigida por el catedrático Jesús Villadangos Alonso, del Instituto de Smart Cities (ISC) de la UPNA, y el siguiente paso es la validación en ensayos de campo controlados.

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN