El Gobierno de Navarra dará en 2026 un nuevo impulso al trabajo autónomo con una convocatoria de subvenciones dotada con un millón de euros destinada a financiar la primera contratación laboral por parte de personas trabajadoras autónomas. La medida, aprobada en la sesión de este miércoles, prevé ayudas de entre 5.000 y 9.500 euros por contrato, lo que permitirá cubrir entre el 23% y el 44% del coste empresarial equivalente al Salario Mínimo Interprofesional.
La iniciativa, tramitada por el Servicio Navarro de Empleo–Nafar Lansare (SNE-NL), busca facilitar el crecimiento real de los pequeños negocios, mejorar su capacidad productiva, consolidar clientela o abrir nuevas líneas de actividad. También pretende aliviar las dificultades de conciliación y ofrecer margen para afrontar bajas, períodos de maternidad o paternidad y otras ausencias.
La convocatoria, que se publicará en los próximos meses en el Boletín Oficial de Navarra, se resolverá por evaluación individualizada y presenta incentivos más altos y supuestos más amplios que otras líneas del SNE-NL. Por primera vez, permitirá contratar a cualquier persona desempleada, sin restringir la ayuda a colectivos con especiales dificultades de inserción, aunque estos seguirán recibiendo un impulso reforzado: la cuantía será un 85% superior a la de la convocatoria ordinaria.
El Gobierno recuerda que estas medidas se alinean con su acuerdo programático (2023-2027), que fija como prioridad unas políticas activas de empleo basadas en la igualdad de oportunidades y centradas en jóvenes menores de 30 años, mayores de 55, personas en paro de larga duración, perceptoras de Renta Garantizada o IMV, personas con discapacidad, con necesidades de inserción social o mujeres víctimas de violencia de género. Además, la nueva convocatoria incluye una mejora de hasta el 140% en las cuantías cuando concurran criterios de género o ruralidad.
Un colectivo envejecido y con escasa contratación
El Ejecutivo foral subraya que la medida se dirige a un colectivo numeroso pero en descenso. Según los datos de Seguridad Social de junio de 2025, Navarra cuenta con 46.554 personas trabajadoras por cuenta propia, de las que 25.294 son autónomos físicos. Un 35% son mujeres y un 32% supera los 56 años. La inmensa mayoría —el 83%— no tiene personal contratado, y sólo el 10% incorpora trabajadores asalariados pasados dos años y medio desde su alta en el RETA.
Para el SNE-NL, estas cifras revelan “un importante margen para que las personas trabajadoras autónomas creen empleo y vean mejorada su situación”, por lo que esta línea de apoyo se suma a otras ya disponibles: asesoramiento al emprendimiento, formación específica, ayudas por nuevas altas en el RETA y subvenciones para contratación vinculada a la conciliación.
Ayudas al traspaso de negocios en localidades pequeñas
En paralelo, el Gobierno también ha dado luz verde a otra convocatoria prevista para 2026, dotada con hasta 140.000 euros y dirigida a cubrir gastos por traspaso de negocios ubicados en municipios de menos de 5.000 habitantes. Las ayudas, igualmente en régimen de evaluación individualizada, buscan evitar cierres, favorecer el relevo generacional y garantizar la continuidad de actividades que resultan esenciales para la vida diaria en el medio rural.
El objetivo último es promover empleo autónomo y asegurar que los pueblos mantengan servicios básicos y tejido económico, tanto el ya existente como el que pueda surgir con nuevas iniciativas.







