Este lunes 1 de julio, a las 19:00 horas, la Plaza del Vínculo de Pamplona acogió un emotivo acto de homenaje a Nagore Laffage, asesinada hace 17 años durante los Sanfermines de 2008. El evento, impulsado por el movimiento feminista navarro, buscó mantener viva su memoria, exigir justicia y reafirmar el compromiso colectivo frente a la violencia machista.
El acto contó con la participación musical de Aurora Beltrán, El Drogas y Kai Etxaniz, quien presentó una canción compuesta expresamente para Nagore y para todas las víctimas de violencia de género. También se recitó un poema creado por una integrante del grupo de mujeres ACUDEMA, como parte del tributo.
El acto fue retransmitido en directo por Festaro TV y pudo verse a través de Pamplona Televisión.
El homenaje se celebró bajo el lema «17 años sin Nagore: ni un paso atrás», y puso el foco en la lucha por una convivencia en igualdad, libre de violencias machistas. En un año especialmente duro, con 47 feminicidios en lo que va de 2025, las organizadoras recordaron que «seguimos aquí para darle una vez más la voz y la palabra que le fue arrebatada».
Desde Lunes Lilas Navarra, se denunció la presencia de discursos negacionistas de la violencia de género en espacios de poder y se reclamó una justicia no patriarcal, con más recursos para prevención, atención integral, autodefensa feminista, educación afectivo-sexual y protección para víctimas, incluyendo a menores. También insistieron en que el centro de atención 24 horas a la violencia sexual debería llevar el nombre de Nagore Laffage, como forma de reparación y reconocimiento.
La madre de Nagore, Asun Casasola, su hermano Javier y el recuerdo de su padre Txomin Laffage, estuvieron una vez más en el centro de este homenaje, al que se sumaron representantes de colectivos feministas, peñas sanfermineras, agentes culturales e instituciones.
El acto acabó un poco precipitadamente por la tromba de agua que sacudió a esa hora el centro de Pamplona.
En vísperas del txupinazo, que este año lanza Yala Nafarroa, el acto concluyó con un llamamiento a unas fiestas libres de agresiones sexistas, homófobas y racistas, y con una afirmación clara: «Nagore, no te olvidamos. Nunca más a ninguna».