El sindicato LAB ha denunciado con firmeza “la injustificable destrucción” de más de 600 puestos de trabajo directos y cientos de indirectos en la planta de BSH en Eskiroz, tras el acuerdo alcanzado el 17 de julio por UGT, CCOO, ATISS y Solidari con la empresa.
Según LAB, este pacto, sellado tras un mes y ocho reuniones, supone “el acta de defunción” de estos empleos y valida las “falsas causas” presentadas por BSH para justificar el cierre.Desde diciembre de 2024,
LAB asegura haber defendido los puestos de trabajo mediante movilizaciones y acciones en diversos ámbitos institucionales y sociales. Sin embargo, el sindicato expresa “rabia, pena y frustración” ante lo que considera un cambio de postura de última hora por parte de la mayoría sindical, que inicialmente mostró unidad contra las razones “sin pies ni cabeza” esgrimidas por BSH.
LAB sostiene que el objetivo real de la multinacional es “ganar más pagando menos”, en un contexto de deslocalización evidente, pese a que la empresa lo niegue.
El proceso de negociación ha sido calificado por LAB como “chapucero”, destacando el uso de argumentos económicos inconsistentes en un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) productivo, respaldado por un informe de consultoría claramente favorable a la empresa.
Además, critican que BSH, que reparte “dividendos estratosféricos”, haya ignorado alternativas planteadas durante siete meses de protestas por parte de la plantilla y la sociedad navarra.LAB lamenta que este acuerdo “echa por el suelo” la defensa de la industria navarra, que movilizó a la ciudadanía en febrero, y avala la pérdida de un patrimonio social y económico con casi 60 años de historia.
El sindicato reafirma su compromiso de seguir luchando por el derecho al empleo de la clase trabajadora navarra, frente a lo que considera una “esquilmación” por parte de BSH.
