El Castillo de Gorraiz Valle de Egüés sufrió este sábado una clara derrota por 95-70 en su visita al UEMC Baloncesto Valladolid, en un partido en el que los locales demostraron su superioridad física y su acierto ofensivo durante los cuarenta minutos. Pese a ello, el conjunto navarro ofreció fases de buen juego y actitud competitiva que dejan sensaciones positivas de cara al futuro.
El inicio fue igualado, con los de Jotas Unzué manteniéndose cerca en el marcador. Sin embargo, a partir del ecuador del primer cuarto, el Valladolid comenzó a imponer su dominio interior y a abrir brecha. El conjunto navarro intentó reaccionar en el segundo periodo con un triple de Del Val que redujo la diferencia a diez puntos, pero un nuevo parcial de los locales volvió a ampliar la distancia. Zizic rompió la sequía con un espectacular mate, aunque al descanso los pucelanos ya mandaban por 52-36.
Tras el paso por vestuarios, el Valle de Egüés salió con energía. Un triple de Calvo y una canasta de Lacunza acercaron a los navarros (52-41), pero el UEMC Baloncesto Valladolid respondió con un contundente parcial que llevó la ventaja hasta los 23 puntos (66-43), obligando a Unzué a parar el partido. Los locales no bajaron el ritmo y cerraron el tercer cuarto con un cómodo 78-52.
En el último periodo, los egüesinos siguieron compitiendo con orgullo, tratando de recortar diferencias y mantener la intensidad hasta el final. Sin embargo, el conjunto vallisoletano mantuvo su acierto y control del juego para sellar el definitivo 95-70.
Pese al marcador, el Castillo de Gorraiz Valle de Egüés mostró compromiso y dejó destellos de buen baloncesto, en especial en la dirección y en la lucha por el rebote. El equipo ya piensa en su próximo compromiso liguero, en el que recibirá a la Cultural y Deportiva Leonesa en Sarriguren, con el objetivo de transformar las buenas sensaciones en una nueva victoria.
Foto: Baloncesto Valladolid






