Agentes del Puesto de Lerín de la Guardia Civil de Navarra han abierto una investigación contra dos varones, vecinos de la Merindad de Estella, como presuntos autores de un delito contra la flora y la fauna. Los hechos se produjeron el pasado fin de semana en el paraje conocido como “Los Peros”, en el término municipal de Arellano, mientras los implicados presuntamente practicaban la caza furtiva en condiciones prohibidas por la normativa foral.
La actuación se inició cuando los agentes, en servicio de seguridad ciudadana, localizaron un vehículo todoterreno estacionado y abierto cerca de la ermita de San Pedro. En su interior, se apreciaron dos rifles de caza mayor fuera de sus fundas. Tras una inspección más detallada, se halló uno de los rifles con el cargador municionado y listo para ser usado, así como una linterna de gran potencia, cartuchería y la funda de un visor nocturno o térmico. Cabe destacar que el uso de este tipo de visores está prohibido para la actividad cinegética según la Ley Foral 17/2005 de Caza.
Pocos minutos después, un varón, propietario de un arma y familiar del titular del vehículo, se presentó en el lugar, reconociendo carecer de la documentación y autorización necesarias para cazar bajo esas circunstancias. Posteriormente, la investigación permitió identificar a un segundo implicado, otro varón y propietario del otro rifle, quien presuntamente se había ocultado en las inmediaciones aprovechando la nocturnidad y la orografía del terreno.
La intervención de la Guardia Civil pudo constatar que ambos individuos se encontraban cazando en horario nocturno y en un día inhábil de caza, lo que incumple gravemente la Orden Foral 189E/2025 que regula la disposición general de vedas para la temporada actual. Los hechos ya han sido puestos en conocimiento de la autoridad judicial competente, al considerar que son constitutivos de un delito tipificado en los artículos 334 y 335 del Código Penal.







