El Grupo de Investigación y el Grupo de Proximidad de Policía Municipal de Pamplona, con la colaboración de Policía Foral de Navarra, ha desmantelado un punto de tráfico de sustancias estupefacientes en el barrio de Rochapea. En la operación han sido detenidos una mujer y un hombre a quienes se les acusa de traficar con drogas. Las detenciones tuvieron lugar ayer, 24 de abril, aunque la operación dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona comenzó en el mes de marzo. Ambos detenidos, que tras pasar a disposición judicial han quedado en libertad con cargos, tenían antecedentes delictivos.
La investigación, comenzaba por las quejas vecinales relacionadas con el tráfico de drogas y la percepción de inseguridad en la zona. Policía Municipal comienza a controlar la bajera a la que alude el vecindario y comprueba un inusual flujo de personas e indicios de que se está pernoctando de forma irregular en ese espacio. En los controles realizados a la salida del local, las patrullas firman actas de aprehensión de sustancias sicotrópicas en quienes abandonaban la bajera, en las que incluso a veces se aprecian síntomas de influencia por consumo.
Con esa evidencia Policía Municipal presenta diligencias ante el Juzgado de Instrucción al que solicita, asimismo, autorización para acceder a la bajera y registrarla, un permiso que se produce el miércoles 23 de abril. El registro se realiza el jueves 24 en presencia de la Letrada de la Administración de Justicia, con la colaboración del Grupo de Investigación Especial (GIE) de Policía Foral de Navarra; para hacer posible el registro se debieron usar elementos contundentes como arietes ya que la puerta estaba dotada de medidas de refuerzo para impedir su fractura, así como una mirilla con cámara.
La policía detenía a una mujer, P.D.M. de 46 años y de un hombre I.S.L. de 44 años, en el transcurso del registro en el que se comprobaba, además, que, pese a la falta de higiene y la insalubridad notoria, se estaba usando la bajera como domicilio y albergaba un perro raza peligrosa. Entre otros objetos encontrados en el local hay sustancias en polvo utilizada para el “corte” de droga y para fabricar la base de la cocaína, varias bolsas de plástico y sus recortes para envolver las dosis de droga, una balanza de precisión y elementos usualmente vinculados al consumo de droga como cucharillas y pipas para fumar la base de cocaína. Asimismo, se encontró dinero en efectivo y una libreta de anotaciones contables, así como un patinete eléctrico que servía como vehículo para desplazarse en posibles transacciones y venta de droga. La bajera ha sido clausurada.
