El secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, se ha reunido hoy en la sede del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) con Mikel Irujo, consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial de Navarra, para analizar la propuesta inicial de la planificación eléctrica con horizonte 2030.
El encuentro se enmarca en la ronda de reuniones que el Ejecutivo central mantiene con las comunidades autónomas antes de la apertura de la fase de consulta pública, en la que agentes económicos, sociales e institucionales podrán presentar aportaciones.
Durante la sesión de trabajo, en la que participaron técnicos del Gobierno navarro, de la Secretaría de Estado de Energía y del Operador del Sistema, ambas administraciones coincidieron en destacar la oportunidad que representa este nuevo ciclo de planificación para avanzar en la electrificación de la economía, especialmente en el ámbito industrial.
En el caso de Navarra, el impulso de la generación renovable permitirá cubrir con fuentes limpias el 50% del consumo eléctrico en 2030, un objetivo relevante para una comunidad con un tejido industrial fuertemente vinculado al sector energético. Según el MITECO, el desarrollo de proyectos de demanda eléctrica que aprovechen esta capacidad renovable abre la puerta a precios competitivos y nuevas oportunidades socioeconómicas.
Preocupación en Navarra
Tras concluir el encuentro, Mikel Irujo se mostró “profundamente preocupado” porque, en su opinión, “algunas demandas no han sido debidamente atendidas” por el Gobierno central. El consejero navarro subrayó que la planificación debe tener en cuenta la especificidad industrial y territorial de Navarra para garantizar que la transición energética no solo sea viable técnicamente, sino también justa y equilibrada.
Proceso abierto a participación
La propuesta inicial de planificación se ha elaborado con criterios técnicos a partir de las aportaciones recogidas en fases previas. Tras las reuniones autonómicas, el documento se someterá a consulta pública y, en paralelo, a su evaluación ambiental estratégica.
Una vez finalizado este proceso, el análisis técnico se remitirá a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que evaluará la sostenibilidad económica y financiera. Con sus conclusiones se elaborará el documento consolidado y la declaración ambiental estratégica, que deberán presentarse en el Congreso de los Diputados antes de su aprobación definitiva por el Consejo de Ministros.
Una planificación de país
La propuesta, presentada el pasado 12 de septiembre por la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, prevé una inversión superior a los 13.500 millones de euros. El objetivo, según el MITECO, es que el incremento de capacidad de las infraestructuras eléctricas se destine a proyectos con mayor impacto socioeconómico y menor huella ambiental, evitando un encarecimiento de la factura para los consumidores.
En total, la planificación contempla 27,7 GW de nuevas demandas con conexión a la red de transporte y 5,3 GW de apoyo a redes de distribución, cifras que equivalen al 85% de la demanda máxima registrada en el país en 2024.
De este modo, Navarra se suma al proceso de diseño de una planificación que el Gobierno central define como una “oportunidad de país”, aunque la advertencia de Irujo pone de relieve las tensiones entre el Ejecutivo foral y el estatal respecto a la atención de las necesidades específicas de la comunidad.