Catorce chicos y chicas de los centros de ASPACE en Pamplona y Bera participaron esta mañana en una jornada de espigamiento en una finca de la conservera Pedro Luis en Lodosa, organizada por el Consejo de la Producción Agraria Ecológica de Navarra (CPAEN/NNEPK). El objetivo: recoger calabazas que se transformarán en 5.000 tarros de conserva destinados a comedores sociales.
La actividad, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Lodosa y se celebra por segundo año consecutivo, forma parte del plan de colaboración entre CPAEN y ASPACE, centrado en la ecología, la solidaridad y la puesta en valor del trabajo de las personas con parálisis cerebral.
“Hay veces en las que te ayudan y veces en las que hay que echar una mano”, comentaban los y las participantes al llegar a primera hora a la huerta, donde recogieron a mano dos cajones de calabazas. Junto a ellos estuvieron la presidenta de CPAEN/NNEPK, María José Arrondo; la alcaldesa de Lodosa, Laura Remírez, y el empresario conservero Pedro Luis, quienes no dudaron en sumarse al trabajo en el campo.
Tras la recogida, el grupo visitó las instalaciones de Conservas Pedro Luis, donde disfrutaron de un almuerzo ecológico y participaron en la preparación y corte de las calabazas para su procesamiento. La jornada culminó con una comida ofrecida por el Ayuntamiento en el restaurante Antonio de Lodosa.
La iniciativa, que combina sostenibilidad y compromiso social, continuará en los próximos meses con la entrega de los tarros elaborados a comedores sociales. En esta segunda fase participarán las personas no ambulantes de ASPACE, encargadas de distribuir las conservas y cerrar así el ciclo de una experiencia que, un año más, ha unido campo, solidaridad y comunidad.